Imágenes recién publicadas de Hamás, del 7 de octubre de 2023, muestran a terroristas y civiles gazatíes secuestrando a mujeres y niños israelíes del Kibutz Be’eri, una comunidad situada a solo dos millas de la frontera con Gaza. Las grabaciones destacan la brutalidad coordinada que dejó más de 1,200 israelíes muertos hace dos años y reavivan el debate sobre la amenaza continua de Hamás al Estado judío.
Los videos, compartidos por Joe Truzman, analista de la Foundation for Defense of Democracies, muestran a milicianos armados de Hamás y civiles conduciendo a mujeres y niños a punta de pistola. En una de las escenas, un comandante de Hamás besa la cabeza de un niño mientras los cautivos son llevados. En otra, un palestino vestido de civil ata las muñecas de una mujer antes de asesinarla. “En la visión distorsionada de Hamás, las atrocidades del 7 de octubre no son una abominación moral, sino un triunfo digno de imitación”, dijo Truzman al Washington Free Beacon.
Un exfuncionario de defensa israelí declaró: “Mujeres de mediana edad masacradas a sangre fría. Niños secuestrados de sus camas con sus pijamas y uniformes de fútbol. Civiles palestinos mirando y celebrando—y en algunos casos participando. Es enfermizo.”
Las imágenes subrayan las atrocidades que desencadenaron la actual campaña de Israel para desmantelar a Hamás. Mientras continúa la negociación del plan de paz de 20 puntos del presidente Donald Trump, Hamás enfrenta una creciente presión internacional para desarmarse y liberar a los 48 rehenes restantes.
Los senadores Joni Ernst (republicana por Iowa) y John Fetterman (demócrata por Pensilvania) presentaron una resolución bipartidista que marca el segundo aniversario del ataque, condenando el uso de la violación como arma de guerra por parte de Hamás y reafirmando el derecho de Israel a existir.