La comisión America250, financiada por los contribuyentes y dirigida por la exfuncionaria de Obama Rosie Rios, se ha asociado con un grupo activista de izquierda conocido por su campaña para borrar a Cristóbal Colón de la historia de Estados Unidos.
Rios, nombrada por el expresidente Joe Biden para supervisar las celebraciones del 250.º aniversario del país, seleccionó al Congreso Nacional de Indígenas Americanos (NCAI, por sus siglas en inglés) para ayudar a organizar los festejos del semiquincentenario. America250 describió al NCAI como un “experto en la materia” sobre historia indígena, pero el grupo ha liderado esfuerzos para retirar estatuas de Colón, cambiar el nombre del equipo Washington Redskins y promover la sustitución del Día de Colón por el Día de los Pueblos Indígenas.
En junio de 2020, el NCAI celebró la retirada de estatuas de Colón, calificando al explorador como un símbolo de “odio, genocidio y fanatismo”. El grupo también elogió a los legisladores de California en 2022 por eliminar el nombre de Colón de un tramo de la autopista interestatal 10.
Rios y America250 han repetido esos sentimientos al promover un artículo titulado “Desaprendiendo los mitos del Día de Colón”, que afirmaba que “celebrar a Colón y a otros exploradores como él ignora las devastadoras pérdidas sufridas por los pueblos indígenas”.
La decisión de asociarse con el NCAI probablemente reavive las críticas hacia Rios, quien anteriormente afirmó que “nada bueno” podía salir de la presidencia de Donald Trump y lo acusó de haber “demonizado… a mi gente”. El senador Eric Schmitt (R-MO) ha pedido su destitución, citando “un historial de sesgo partidista extremo”.
La controversia surge mientras Trump restaura el Día de Colón como festividad federal, declarando: “Día de Colón, ¡hemos vuelto, italianos!” Las encuestas muestran que el 69 % de los estadounidenses considera a Colón una “parte importante de la historia estadounidense.”